MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Pobreza y marginación, la otra cara de Tulum

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Si bien en 2023 a los tulumnenses no les fue bien, ahora en este año 2024 el panorama no pinta nada bien.

El Gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador (AMLO) recorta cada vez más presupuesto para el desarrollo en el municipio, dejando las manos atadas a los gobiernos estatales y municipales.

Asimismo, Tulum sólo crece en las zonas adineradas, mientras que en las zonas marginadas solo crece el desempleo y la pobreza.
Tulum es una maravilla del mundo: es considerado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por sus hermosas playas, cenotes, ruinas, fauna y flora, con poco más de una extensión territorial de 2 mil 90.43 kilómetros cuadrados.

El significado de su nombre proviene de los orígenes en Zamá, que quiere decir “amanecer”. Podemos decir que es una maravilla ante los ojos de todos, pero lamentablemente sólo la gente rica puede pagar los lujos que ofrece Tulum.

Mientras tanto la otra cara del lugar la podemos observar en las periferias: cómo vive la clase trabajadora, la gente más humilde. Muchas de las colonias en donde viven no tienen servicios básicos, aunque con sus manos y el sudor de su frente crean las riquezas que no se distribuyen equitativamente.

El lado oscuro que nadie quiere ver es el alto nivel de desempleo: de acuerdo con los últimos reportes, la informalidad laboral creció en un 53 %, según la Población Económicamente Activa. Y aún hay más datos fríos para este 2024 según la Secretaría del Trabajo y Previsión social: los municipios de Tulum y Felipe Carrillo Puerto se van a dividir cerca de 20 mil desempleos al culminar las megaobras del Gobierno federal.

Por otro lado, crece a lo bestia la inseguridad, mientras disminuye el financiamiento a la salud y la educación. Tan sólo el Presupuesto de Egresos Estatal para este 2024 fue de 47 mil 352 millones 603 mil 524 pesos. A Tulum le fueron asignados poco más de mil 225 millones de pesos. Pero ¿que se hará con el presupuesto?

Un poco más del 60 % se destinará al rubro “gastos personales”, que por si no lo sabes, le atañen al famoso y no mencionado Capítulo 1000 del Presupuesto de Egresos de los municipios. Donde los funcionarios tienen su nómina, viáticos, los vales de gasolina, choferes, etcétera, etcétera, pero menos para el pueblo.

Mientras en Tulum los turistas extranjeros y nacionales abarrotan los hoteles, playas, ruinas y cenotes, la otra cara de la ciudad es la gente pobre que vive en casa de madera, de lámina, sin un trabajo fijo y bien pagado y cuyas colonias carecen de servicios básicos como calles y banquetas. La otra cara es la de miles de personas desempleadas por no contar con el apoyo del gobierno federal, estatal y municipal.

Es muy triste la indiferencia gubernamental, que hasta hoy no han logrado combatir este mal que lastima a nuestro municipio. El actual alcalde Diego Castañón tiene un enorme compromiso con la gente trabajadora en el municipio, y antes que culmine su administración debe hacer todo lo posible para el bienestar del pueblo y hacer posible lo que otros no han logrado, que los tulumnenses tengan empleos con salarios justos, centros de salud, canchas deportivas, seguridad y sobre todo mejorar las condiciones de las escuelas. 

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